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Einen Teppich aufbewahren

¿Tienes que guardar una alfombra? 6 cosas que debes tener en cuenta

A veces es necesario guardar una alfombra. Por ejemplo, si te mudas de casa o si has comprado una alfombra nueva pero quieres conservar la vieja para más adelante. Parece buena idea guardar la alfombra en el desván o en el sótano. Allí está bien seca. ¿Verdad?

Desgraciadamente, no.

De hecho, el desván y el sótano son prácticamente los peores lugares para guardar una alfombra. Así pues, ¿dónde debes guardar tu alfombra y qué más debes tener en cuenta si quieres guardarla en algún sitio durante un tiempo?

1. La limpieza

ntes de guardar una alfombra, debes limpiarla a fondo. Preferiblemente con un limpiador profesional. Si no, puedes limpiar la alfombra tú mismo con un kit de limpieza.

2. ¿Dónde puedes guardar tu alfombra?

Busca un lugar de la casa donde puedas colocar una alfombra. Preferiblemente en un lugar que no esté en contacto directo con el suelo. Por ejemplo, en un estante de la pared o encima del armario.

¿Por qué no en el desván o el sótano? Porque son los lugares de la casa que suelen estar más húmedos, y la humedad es el mayor enemigo de una alfombra enrollada y almacenada. Si la desenrollas al cabo de un año, te sorprenderá una gruesa capa de moho maloliente. El armario es la mejor solución.

3. Limpia el almacén

Además de la alfombra en sí, también debes limpiar el lugar donde vas a guardarla. Se puede acumular mucho polvo encima del armario y, si no lo quitas, puede acabar en tu alfombra. Cuanto más limpia esté la zona de almacenamiento, mejor se conservará tu alfombra. Así que, ¡a limpiar!

4. Embálala bien

Para proteger tu alfombra del polvo y la suciedad, debes envolverla. El papel funciona muy bien para esto. Enrolla bien la alfombra, con el pelo hacia dentro, y envuélvela bien con el papel. Ahora ya puedes guardarla.

5. Limpia de vez en cuando

Aunque hayas limpiado bien la alfombra y el trastero, no puedes evitar que se asiente nuevo polvo y suciedad. Por eso es buena idea refrescar y limpiar el trastero de vez en cuando. Así evitarás que la suciedad se remueva y acabe en tu alfombra.

6. Evita colocar peso encima

Cuando la alfombra limpia y empaquetada esté en su bonito y limpio lugar de almacenamiento, no debes colocar ningún objeto pesado encima, pues de lo contrario la alfombra podría deformarse irreparablemente.

Por tanto, enrollar la alfombra y guardarla en el desván durante un tiempo no es una buena idea. Piensa dónde tienes espacio en casa para guardar la alfombra durante un tiempo y asegúrate de que la alfombra y la habitación están bien limpias. Cuando vuelvas a sacarla al cabo de unos meses, podrás disfrutar de una alfombra impecable, sin olores extraños ni desperfectos.